domingo, 14 de agosto de 2011

¿De qué están hechos los sueños?


Me permito pensar en esas cosas que antes me había prohibido terminantemente. No puedo evitar esa tentación de espiarte, de saber de vos sin que te enteres. Esa alegría que me invade al enterarme de tus cosas, es el veneno que recorre mis venas y hace rato que está matando mi corazón. Lo que me matan es lo mismo que me mantiene vivo, vos.
Puedo hacerte desaparecer de mi mundo en un segundo, y olvidarme tu perfume en un instante, pero nunca voy a poder sacarte de mi piel, de mis labios. Esos que te besaron y que serán tuyos para siempre.
Hace rato que no sueño, hace tiempo que duermo tan poco y tan profundo que no me doy el lujo. Estoy seguro que de hacerlo vos serias ese contenido latente. Yo en cambio solo alcanzo un papel secundario, un contenido manifiesto. Aún así, estoy muy convencido que algún día, vas a volver a soñar conmigo.




miércoles, 3 de agosto de 2011

De vivir sin tener nada.


El reparto para mi fue justo. Sin duda planear ser alguien que es imposible ser, trae una catarata de sucesos desafortunados que nos complican la existencia. Nada mejor que querer ser un buen amigo, un novio fiel, un hermano comprensivo o un periodista que diga la verdad. Pero cuando pensamos en ser alguien que cambie el mundo debemos ser personas de cuidado. 


Al pensar en convertirnos en ese deportista exitoso que todos aman o en esa estrella de rock por quien las chicas enloquecen y los hombres admiran, debemos tener mucho cuidado. No está mal permitirse soñar, solo que a veces esos sueños se convierten en algo más, se transforman en el anhelo de vivir una vida de goces que no necesitamos, pero como no los tenemos siendo el novio fiel o el periodista honesto,  los deseamos. Nuestra mente se llena de esos pensamientos y al final ¿de que sirve? 


Todos deseamos algo que no tenemos, no imagino a una sola persona en el mundo que no desee algo que no esté a su alcance. Sin embargo existen tantas personas que no valoran nada, pero absolutamente nada, de lo que poseen.

Es importante darse cuenta cuando uno está encerrado en esa utopía de una vida imaginaria. Poder diferenciar nuestros sueños, de los sueños que muchas veces son provocados por la sociedad que nos rodea. De cualquier forma insisto, creo que conmigo se ha sido justo, si, definitivamente, justo.